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Copa América 1987

Copa América Argentina 1987 – 33ª edición

Sede: Buenos Aires, Córdoba, Rosario (Argentina)
Fecha: 27 de junio al 12 de julio
Participantes: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay, Venezuela
Forma de disputa: Fase de grupos, Semifinales, Final
Campeón: Uruguay
Vicecampeón: Chile
Posición de Uruguay: Campeón
Goleadores: 4 – Iguarán (Col), 3 – Maradona (Arg), Letelier (Chi), 2 – Caniggia (Arg), Basay (Chi)
Goleador de Uruguay: Alzamendi, Bengoechea (1)

 

Otra vez, la Celeste rompiendo todos los pronósticos, eliminando a Argentina Campeón del Mundo con Maradona en su propia casa, y en la final a Chile, para alzar por vez 13 la Copa América. ¡Uruguayos campeones! La Copa America 1987, como tantas veces, otra vez se tiñó de celeste.

Llovía, llovía mucho. Diluviaba en realidad. Puebla, 16 de junio de 1986.

Fue el cierre de la era Borrás y la eliminación de la Copa del Mundo de México. El gol de Pasculli a los 42 minutos selló la victoria por 1-0 de la Argentina de Bilardo. Aquel partido cerró el ciclo de muchos jugadores.

Un año después, la Copa América cambiaba de nombre y volvía a su viejo formato. Los viejos Sudamericanos se llamarían distinto y retornaban al esquema de sede única. En el marco de la rotación decidida por la Confederación Sudamericana de Fútbol, que abría la era Nicolas Leoz, Argentina tenía la responsabilidad de organizar la nueva edición. Uruguay, como campeón vigente, debutaba el 9 de julio en el Monumental de Nuñez ya en semifinales.

 

ROBERTO FLEITAS, EL NUEVO TECNICO

 

El año 1987 alumbró con un Comité Ejecutivo provisorio de la Asociación Uruguaya de Fútbol, presidido por el dirigente de River Plate, Cr. Miguel Volonterio, y con dos torneos importantes para la Celeste: el Pre- Olimpico clasificatorio para los Juegos de Seul 1988 y la Copa América a mitad de año en Argentina.

En febrero, el Ejecutivo, a días de marcharse, designó a la dupla Roberto Fleitas-Cono Caminatti para tomar la conducción de la Selección Nacional.

El 26 de febrero, aún con Volonterio como presidente de AUF, Roberto Fleitas dió a conocer la nómina de los 26 futbolistas designados para el Pre-Olimpico que se jugaría en Bolivia en el mes de abril.

Pablo Bengoechea, Luis Noé, Enrique Báez, Gonzalo Díaz, Mario Rebollo, Enrique Peña y Walter Pelleti, de Montevideo Wanderers; Eduardo Pereira, Obdulio Trasante, Eduardo Da Silva, José Perdomo, Juan Carlos Paz y Daniel Vidal, de Peñarol; José Luis Pintos Saldanha, Gustavo Faral, Santiago Ostolaza y Mauricio Silvera, de Nacional; Sergio Cid y Erardo Cóccaro de Progreso; Juan Andres Larre y Adolfo Barán de Bella Vista; Héctor Tuja y Oscar Aguirregaray de Defensor; César Pereira de Central Español, Jorge Seré de Danubio y Ramón Castro de Cerro. 

 

EL PRE-OLIMPICO

 

Uruguay viajó hacia Santa Cruz de la Sierra para el Pre-Olimpico clasificatorio para Seúl 1988. El lunes 20 de abril de 1987 debutó la celeste en el Pre-Olímpico ante Perú.

Victoria 1-0 con gol de Walter Pelletti. Uruguay con Seré, Rebollo, Aguirregaray, César Pereira, Enrique Peña, Pintos Saldanha, Pelleti, Larre, Enrique Baez, Bengoechea y Mauricio Silvera.

El miércoles 22 abril se volvió a jugar. Esta vez fue empate 0-0 ante Colombia.

El viernes 24 abril, en la continuidad de la dinámica de jugar cada 48 horas, Uruguay volvió a jugar y empatar ante Brasil 1-1, con gol de Pablo Bengoechea. El resultado dejaba a la Celeste en segundo lugar en el grupo a falta de una sola fecha para cerrar fase de grupos, y con chance cierta de clasificación.

Pero con la derrota 1-0 ante Paraguay, la Celeste quedó igualada en puntos y en saldo de goles con Brasil y los paraguayos, pero por menor cantidad de goles convertidos quedó cuarta en la llave y eliminada del Pre-Olimpico.

 

LOS “REPATRIADOS”

 

Se iba Mayo. Se acercaba la Copa América. Con Roberto Fleitas de técnico, que confirmaba: “(Del exterior) No traeremos más que los cuatro jugadores que se han dicho (Ruben Sosa, Nelson Gutierrez, Antonio Alzamendi y Enzo Francescoli)”. “Solo 4 repatriados”, titulaba EL DIA.

Tres de ellos habían estado en México 86 (Enzo, el “Tano” Gutiérrez y Alzamendi) y uno representaba una novedad y una gran ilusión, Ruben Sosa.

“Sosa y Alzamendi pueden ser los dos puntas adelante. Creo que Francescoli le va a rendir más al equipo arrancando un poco más atrás. Colaborando en la generación de fútbol. No darle la responsabilidad de jugar de punta. Que esté Enzo en el equipo no descarta que pueda jugar Bengoechea. A partir de junio probaremos y de allí saldrá el equipo” , afirmaba el DT, el 28 de mayo.

Y revelaba un secreto:“Cuándo volví de Bolivia (del Pre-Olimpico) me encontré con un Matosas con una exuberancia que me sorprendió, Y por otra parte, mucho más compensado en sus esfuerzos dentro del campo”.

Gustavo Matosas fue clave en la marca al hombre a Diego Maradona aquella jornada del 9 de julio.

 

“URUGUAY EN EL CIRCO ROMANO”

 

El sábado 6 de junio, el periodista Javier de León le realizó una nota a Roberto Fleitas que levantó polvareda en Argentina. Roberto estaba reunido con Obdulio Trasante y Eduardo Pereira, en la casa del primero, e hizo referencia al “Circo Romano”.

“Da la impresión que vamos al Circo Romano. Los argentinos preparan todo en su fecha patria para lograr un gran triunfo. Nosotros deberíamos ser la diversión. Pero consideramos que hay que trabajar para mentalizar a los muchachos que se puede obtener un resultado favorable. Nosotros especulamos con otra cosa. Si bien la lógica estaría indicando que Argentina debe ganar hay tantos factores en un partido que se puede salir adelante. Todo esto debe ser un gran desafío. Los jugadores deben estar conscientes de lo que nos jugamos. Hay que tocar la fibra más íntima de cada uno y de esa manera obligarlos aún más para el esfuerzo”.

En Argentina repercutieron y acusaron al técnico celeste de “abrir el paraguas”. Finalmente , solo fuegos de artificio. Aunque quedaba claro que el clásico rioplantense traería chispazos …

 

EL PLANTEL DE 18 JUGADORES

 

Roberto Fleitas, a cuatro días de iniciar los entrenamientos, repasaba el plantel de 18 fubolistas:

 

Eduardo Pereyra

Jorge Seré

Nelson Gutiérrez

Obdulio Trasante

Oscar Aguirregaray

Gonzalo Díaz

Alfonso Domínguez

José Luis Pintos Saldanha

José Perdomo

Gustavo Matosas

Enrique Peña

Erardo Cóccaro

Pablo Bengoechea

Enzo Francescoli

Ruben Sosa

Enrique Báez

Mauricio Silvera

 

El plantel rescataba algún jugador del Pre-Olímpico, incorporaba a futbolistas de Peñarol y Progreso, tenía tres sobrevivientes de México 86 (Francescoli, Gutierrez y Alzamendi) y la cara nueva de Ruben Sosa.

A último momento, afectado de varicela fue sustituído Enrique Báez. El miércoles 1 julio, a 8 días del debut, cuándo la selección estaba en Maldonado para un amistoso ante la selección local, se conoció la noticia. La salida de Báez significó el ingreso al grupo de 18 jugadores del aurinegro Eduardo Da Silva.

 

ARGENTINA SE CONFIRMA COMO RIVAL

 

El 27 junio, la Argentina campeona del mundo se presentaba por primera vez en su casa en forma oficial, pero tropezaba ante Perú, un visitante reiteradamente ingrato para los argentinos.

Fue empate 1-1, en el Estadio Monumental de Nuñez, con apertura de Maradona, y empate de Reyna en el segundo tiempo.

El 2 julio, otra vez en el Monumental, pero esta vez con sólo 30 mil personas, Argentina goleó 3-0 a Ecuador con dos conquistas de Maradona y una de Caniggia, y quedó a la espera del último partido entre peruanos y ecuatorianos.

Como dos días después, el 4 de julio, fue empate 1-1 entre Perú y Ecuador, Argentina confirmó el pronóstico previo: semifinalista el 9 de julio en el Monumental ante Uruguay, el último Campeón de América.

 

SORPRESA CON BRASIL ELIMINADO

 

El 4-0 de Chile ante Brasil en Córdoba, resultó la gran sorpresa de la Copa.

Los norteños quedaron eliminados y los trasandinos avanzaron en el grupo en el que también participó Venezuela.

En el último grupo, asomaba Colombia al fútbol continental, con Valderrama como estandarte. Primero el triunfo 2-0 ante Bolivia, con goles de Valderrama e Iguarán, y luego el 3-0 ante Paraguay, con tres de Iguarán, para clasificar con puntaje perfecto, cinco goles a favor y la valla en cero.

Las semifinales de la Copa América estaban servidas:

El 8 de julio en Córdoba, Chile ante Colombia.

El 9 de julio en el Monumental, Uruguay ante Argentina.

 

A LA PELOTITA

 

 

Volvamos a la pelota.

Martes 7 de julio de 1987, a 48 horas del choque ante Argentina.

La duda era José Perdomo, el volante central de Peñarol. Pero se anunciaba que se había entrenado sin molestias.

Seis goles en la práctica celeste, ante un combinado de la Liga de Seguros.

Al Monumental de Nuñez se podría concurrir al día siguiente, el miércoles, en la jornada previa al partido con Argentina, pero sin pelota. Solo reconocimiento, y solo concurrirían algunos futbolistas.

La gripe amenazaba, en un crudo invierno. El “Tano” Gutiérrez había mejorado, y participó de toda la práctica. También estaba afectado el técnico Roberto Fleitas, y el siempre activo dirigente de Progreso, el “Pistola” Daniel Marciscano, quien en aquel torneo cumplía funciones de cocinero en las instalaciones de concentración en la localidad de Moreno.

 

LA HORA SEÑALADA

 

Llegó el día, jueves 9 de julio de 1987. Fecha patria en Argentina, festejo de la Declaratoria de la Independencia en el Congreso de Tucumán en 1816.

A las tres de la tarde el partido, en pleno feriado. La empresa “ Traffic”, dueña de los derechos de televisión del torneo, había realizado gestiones para cambiar el horario para las 19, a efectos de mejor acceso a mercados europeos, pero el pedido le fue denegado por AFA.

En el Monumental de Nuñez la terna estaba conformada por el ecuatoriano Elías Jacomé, y los líneas , el paraguayo Asterio Martínez y el boliviano Luis Barrancos.

En los celestes, se confirmaba a Nelson Gutiérrez y José Perdomo.

¿Cómo se marcaría a Maradona? Gustavo Matosas, el volante aurinegro, contaba que “Fleitas tiene dos o tres ideas que son buenas”, en entrevista en EL DIA con Abayubá Hérnández.

Se anunciaban 2.000 uruguayos en el Monumental.

En Argentina, el hábil y rápido delantero de River argentino, Claudio Paul Caniggia se confirmaba como titular en lugar de Hernán Díaz. Carlos Bilardo confiaba en la juventud del “Pájaro”.

Ahora, a la cancha …

 

Y GANAMOS, ¡¡URUGUAY NOMÁ!!

 

URUGUAY 1- ARGENTINA 0 

“URUGUAY LE GANO AL CAMPEON DEL MUNDO” , tituló EL DIA el viernes 10 de julio.

“HISTORICA VICTORIA CELESTE AMASADA A FUTBOL Y CORAJE”, agregaba en la última página.

“CAYO EL CAMPEON DEL MUNDO 1 A 0, POR OBRA Y GRACIA DE URUGUAY”, el título de EL PAIS.

“VICTORIA TAN MONUMENTAL COMO EL ESTADIO”, también se titulaba, y en el análisis de las actuaciones individuales de Jorge Crosa se detallaba: “ FRANCESCOLI Y SU TALENTO MAS EL GENIO DE MARADONA”.

 

LOS HEROES DEL 9 DE JULIO

 

Eduardo Pereira , en el arco.

La línea de cuatro con Alfonso Domínguez, Nelson Gutierrez, Obdulio Trasante y José Luis Pintos Saldanha.

Gustavo Matosas y José Perdomo, en primera línea en mitad de cancha.

Pablo Bengoechea con Enzo Francescoli, con libertad.

De punta, Antonio Alzamendi y Ruben Sosa.

Eduardo Da Silva ingresó por Ruben Sosa y Enrique Peña por Pablo Bengoechea.

Argentina jugó con Islas; Brown; Olarticoechea, Ruggeri y Cucciufo; Batista, Giusti, Tapia; Maradona; Percudani y Caniggia.

Ingresaron Funes por Percudani y Alfaro por Cucciufo.

 

EL URUGUAY DE SIEMPRE

 

Aquel Uruguay del 9 de julio de 1987 tuvo figuras maravillosas ante la Argentina campeona del Mundo, que explican por qué otras vez fuimos los molestos mata-locales, invitados atrevidos que nos llevamos el postre destinado al organizador.

Antonio Alzamendi, en su “casa”, el Monumental de Nuñez, con una definición impecable a los 44 minutos, el único gol para el Uruguay 1- Argentina 0.

Un contragolpe perfecto, que inició Francescoli en mitad de cancha, alargó para Ruben Sosa, fue a recibir la devolución cerca del borde del área mayor, y desequilibrado y casi cayéndose, tocó para Alzamendi, quien tiró preciso, a la contrapierna del golero Luis Islas, para ubicar la pelota exacta contra la base del palo derecho del portero argentino.

A propósito de Enzo. Cuatro veces campeón de América con Uruguay, una en Juveniles y tres en Mayores.

Era el plan. Rodear a Maradona, con Gustavo Matosas en tono “sabueso” con persecución casi individual, y aprovechar las ocasiones del contragolpe.

Y como siempre ocurrió a través de la historia del fútbol uruguayo, un triunfo de visitante se cimentó en una tarde inolvidable de nuestro golero.

Eduardo Pereira fue un “monstruo” en el arco. Seguridad siempre, y una atajada que quedará para siempre en nuestras retinas: el cabezazo que le sacó a Juan Gilberto Funes, para ahogar el empate albiceleste.

Aquel Monumental de Nuñez, repleto de argentinos, con algo más de 2000 uruguayos, otra vez vio a la Celeste (aunque se jugó de blanco) en un triunfo épico.

¡A la final de América!

 

A LAS TRES, CON ARPI FILHO DE JUEZ

 

El domingo 12 de julio era la fecha fijada para la final de la Copa América. A las tres de la tarde en el Monumental de Nuñez.

El brasileño Romualdo Arpi Filho el árbitro, el paraguayo Asterio Martínez y el boliviano Luis Barrancos, los líneas.

Uruguay volvía a la celeste tradicional, luego de haber utilizado la blanca ante Argentina.

Se anunciaba que la delegación uruguaya, luego del partido se dirigiría a la casa particular del embajador Barrios Tassano, quién los recibiría con un brindis, para luego partir a las 21.30 desde Aeroparque , hacia Montevideo, llegando antes de la medianoche del domingo a nuestra capital.

 

URUGUAY, ESA ETERNA FABRICA DE HAZAÑAS

URUGUAY 1- CHILE 0 

Veinte mil personas en las tribunas del Monumental. Una recaudación aproximada de 150 mil dólares.

Uruguay con EDUARDO PEREIRA, NELSON GUTIERREZ, OBDULIO TRASANTE, ALFONSO DOMINGUEZ, JOSE PERDOMO, JOSE LUIS PINTOS SALDANHA, ANTONIO ALZAMENDI, GUSTAVO MATOSAS, ENZO FRANCESCOLI, PABLO BENGOECHEA, RUBEN SOSA.

Luego ingresó Enrique Peña por Alzamendi.

En el banco de suplentes, también Jorge Seré, Oscar Aguirregaray, Mauricio Silvera y Eduardo Da Silva.

Chile, dirigido por Orlando Aravena, con Roberto Rojas, Eduardo Gómez, Fernando Astengo, Patricio Reyes, Luis Mardones, Luis Hormazábal, Héctor Puebla (luego Ricardo Toro y  luego Hugo Rubio), Jaime Pizarro, Juan Carlos Letelier, Jorge Contreras e Ivo Basay.

El partido fue una “cacería” de Enzo Francescoli, que recibió entre otras, una durísima falta de Fernando Astengo.

Chile se quedó con 10 jugadores a los 15 minutos por la expulsión de Eduardo Gómez, pero a los 26, Enzo reaccionó ante la enésima falta, y fue expulsado.

Sobre el final, a los 88, también vieron la roja Astengo y Perdomo. Los dos equipos terminaron con 9 jugadores.

Uruguay no logró aprovechar la diferencia numérica lograda al cuarto de hora, jugó nervioso, y la expulsión de Enzo le quitó la diferencia relativa de hombres en campo. Chile emparejó y la primera mitad se fue 0-0.

En el complemento llegó el gol de la victoria.

A los 9 minutos, a la salida de un corner, la pelota derivó hacia el borde del área mayor. José Perdomo llegó de frente , ensayó su siempre potente remate, el balón fue rechazado a medias por el Cóndor Rojas, y Pablo Bengoechea, rápido de reflejos, aprovechó la ocasión en el límite del área chica para volar al gol.

 

MONTEVIDEO, EL INTERIOR, BUENOS AIRES, UNA FIESTA

 

Chile quedó desconcertado y sin reacción. Uruguay tuvo alguna otra ocasión para aumentar, que no se concretó.

No importa. Es meramente anecdótico. Romualdo Arpi pitó el final, y todo fue llanto y fiesta, en esa extraña combinación de lágrimas y alegrías que solemos mezclar los seres humanos.

Ruben Sosa se paseó envuelto en una bandera uruguaya por todo el campo del Monumental. La vuelta olímpica, con la Copa en manos de Enrique Peña y Antonio Alzamendi, en un grupo compacto en el que también aparecían aficionados que habían logrado ganar el campo de juego, fue el marco para el festejo de aquellos privilegiados compatriotas que pudieron estar aquella tarde en cancha de River.

18 de Julio se pobló de banderas. Cada 18 de Julio en cada ciudad del interior se pobló de banderas.

Festejamos otra Copa América, la número 13, una de las más impensadas, porque fuimos al “Circo Romano” para ver celebrar a la Argentina de Maradona campeona del Mundo en su casa, y terminamos bailando con la cumpleañera y siendo el centro de la fiesta.

Que lo expliquen otros.

Uruguay, ESA ETERNA FABRICA DE HAZAÑAS, como tituló EL DIA el lunes 13 de julio de 1987.

¡Que así sea, por siempre!

Material preparado por la Asociación de Historiadores e Investigadores del Fútbol Uruguay (AHIFU) - www.ahifu.uy

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